-La peste de Tharnos-
Tharnos era una gran comarca y la principal abastecedora de cereales del reino, un territorio antaño verde y alegre, cuyo destino fue marcado por la influencia del "Doliente", conocido como uno de los principales sanadores de la corte antes de recibir aquel título envuelto en maldad.
El "Doliente" influenció con su magia oscura en las mentes de los agricultores y del mariscal al cargo de los terrenos, penetró en los sacos de trigo con su veneno y convirtió la carne de los habitantes de Tharnos en una pasta viscosa, asociada a una demencia que les obligaba a actuar como autómatas infestados.
El Consejo Sacro, y los paladines que lo integraban, tomaron la decisión de quemar todos los cultivos e, incluso, de expandir la destrucción a cada casa de Tharnos si fuese necesario.
¡Que la Luz os acompañe y os convierta en sus heraldos! —dijo la sacerdotisa de la capital del reino, justo antes de despedirse de los guerreros y las hechiceras, quienes actuarían como refuerzo en la batalla sin saber si regresarían sanos a sus casas tras enfrentarse a la peste de Tharnos.
«Los tiempos pueden ser oscuros, y la luz de los astros puede mostrarse tenue en el destino de los habitantes de la comarca», pensó el soberano del reino, moviéndose inquieto en la sala del trono y esperando la peor de las desgracias.

Ilustración de vladimir-manyukhin (ArtStation)
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